Por un error tipográfico en una tarjeta, Pelé jugó en 1960 con la Real Sociedad

tarjeta pequeña
Vista de la exposición Lo tengo repe, dedicada a la colección de cromos de fútbol que se podrá ver hasta el 27 de agosto en San Sebastián, España. Foto: EFE/Juan Herrero

Pelé protagonizó la sociedad real en la temporada 1960-61, al menos, en el «espacio mágico» de un cromo de fútbol, ​​una rareza muy apreciada por los coleccionistas por contener un error tipográfico que transformó al mito brasileño en txuriurdin gracias a una colección lanzada en México por una marca de cereales .

Este es uno de los tesoros que se reproduce en la exposición Lo tengo repe, dedicada a la colección de barajitas de fútbol que se celebra hasta el 27 de agosto en San Sebastián, en el centro Cultural Ernest Lluch, ubicado en los bajos del estadio de Anoeta, España.

Barajita, revisión de originales y reproducciones

Mauro Peñalba, encargado del diseño de la exposición, explica a EFE que la exposición propone un repaso, con la Real Sociedad como hilo conductor, por la historia de los cromos de fútbol desde principios del siglo XX hasta la actualidad a partir de unas 400 piezas , principalmente originales y reproducciones, pero también álbumes y objetos de diferentes épocas.

La mayoría de los originales pertenecen a las colecciones particulares de Antonio de la Rosa y José Ramón Ortiz de Urbina, a las que se suman reproducciones de la colección histórica de Panini España, colaboradora en el proyecto, junto con el Museo de la Real Sociedad.

Entre las curiosidades incluidas en la muestra se encuentra la reproducción en mayor formato de una tarjeta en la que aparece Edson Arantes Pelé con el escudo de armas de la Royal Society en una colección lanzada en México por la casa de galletas y cereales Hostess.

La leyenda del fútbol brasileño jugaba en ese momento en el Santos, pero el riesgo de cometer un error lo convirtió, al menos en el espacio de esta cartelera, en un delantero de la Real Sociedad, recuerda Peñalba.

La exhibición juega un jueguito a este fantástico error y plantea la hipotética alineación de una Real Sociedad de la época con el brasileño vistiendo la camiseta blanquiazul en casa.

Foto: EFE/Juan Herrero

Recolecta 400 monedas

Al margen de esta curiosa anécdota, la exposición incluye cerca de 400 piezas, que ofrecen una mirada nostálgica a la evolución de estas piezas de historia en cajas, que irrumpieron en España a principios del siglo XX y se repartían en bombones, aspirinas, paquetes de cigarrillos o cajas de cereales, recuerda Peñalba.

Explica que a veces la única forma de conocer físicamente a un jugador era conseguir una de esas tarjetas en blanco y negro que a veces eran solo una identificación con foto estática del futbolista y solo capturaban la imagen cinco o seis jugadores. Por equipo.

La exposición también incluye una reproducción del primer álbum de mapas publicado en España en 1915 por la editorial Ticket de Barcelona, ​​en el que aparecía el primer mapa impreso de la Real Sociedad.

A partir de entonces, las anécdotas se suceden con curiosas imágenes que rememoran el pasado realista del escultor Eduardo Chillida y el cineasta Elías Querejeta, mostrando a un jovencísimo Imanol Alguacil vestido de jugador o retratando a innumerables ídolos del equipo como Luis Miguel Arconada. , Roberto López Ufarte, Jesús María Zamora, Xabi Prieto y Mikel Oyarzabal.

La exposición, que se enmarca en el festival Korner de la Real Sociedad y Donostia Kultura, sirve también para curiosear algunos grandes éxitos de un equipo, que suma dos Ligas, tres Copas del Rey y una Supercopa de España.

El material y el conocimiento acumulado por los dos coleccionistas ofrecen un recorrido cronológico por la historia de estas cartas coleccionables, que han adoptado múltiples formatos y que, desde casi su nacimiento, llevan intrínsecamente el arte del intercambio.

La irrupción del color en los años 50, la sustitución del papel por el cartón, la introducción de los adhesivos y la entrada en acción en los años 70 de las Colecciones Este y el gran gigante Panini acompañan al espectador en un viaje por un siglo de historia.

Los cromos deportivos, que ya han dado el salto al espacio virtual gracias a las NFT, forman parte del imaginario infantil pero también son una pieza de colección muy codiciada, sobre todo en el caso del béisbol de Estados Unidos, donde hay que subastar unos cromos excepcionales por cinco millones de dólares.

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Fito Saenz Olvera